Hemos integrado en nuestro día a día, como algo cercano y saludable, el consumo de Ibuprofeno, como nuestro antiinflamatorio por excelencia. Además, al ser tan fácil conseguirlo, nos da la falsa seguridad de que no tiene efectos secundarios. Sin embargo, debería ser evitado por las personas con problemas cardíacos o factores de riesgo del corazón (también hígado y riñón). En este artículo, os doy las alternativas naturales:
- Enzimas: Las enzimas bromelaína y papaína se usan en el tratamiento de los dolores, y son especialmente efectivas en las lesiones deportivas. Se toman 2 comprimidos, 3 veces al día.
- Garra del diablo: El harpagofito se toma en cápsulas o en infusión, unos 2-3 grs diarios, y durante periodos mínimos de 15 a 30 días. Su acción antidolorosa y antiinflamatoria no es inmediata, pero es muy eficaz.
- Árnica: Es más eficaz por vía externa, por ejemplo en crema. La tintura de árnica diluida al 5% en alcohol es una excelente friega para el alivio local de las articulaciones doloridas. Es muy eficaz ante golpes y contusiones.
- Capsicum: Los productos con capsaicina (principio picante de la guindilla) alivian dolores herpéticos y reumáticos (vía externa). Un uso prolongado irrita la piel y puede producir quemaduras.
Recuerda, que la inflamación y el posterior dolor, es un mecanismo de defensa del organismo. Combatir la inflamación sistemáticamente no es bueno para la salud; ya que inhibe nuestro sistema natural de curación. Por lo tanto, practicar ejercicio regularmente, masajes, acupuntura, etc. nos van a ayudar a percibir un alivio notable.

